Los mejores remedios naturales para eliminar los hongos de la piel
Los hongos en la piel no solo son molestos, sino también antiestéticos. Suelen aparecer en distintas áreas del cuerpo, como es el caso de los pies, las manos, las axilas e incluso el rostro.
Estos pueden estar causados por dermatofitos, levaduras y otras variedades de este microorganismo que, al aliarse con virus y bacterias, origina infecciones.
Se caracterizan por producir unas manchas de color blanco o rojizo, las cuales suelen venir acompañadas con una incómoda comezón y enrojecimiento.
Tener una enfermedad a causa de estos indica que el sistema inmunológico está débil y no tiene suficientes anticuerpos para combatirlos.
Por fortuna, gracias a los compuestos activos de varios ingredientes naturales, se les puede dar un tratamiento oportuno para que no deriven en trastornos más complicados.
En esta ocasión hemos querido compartir un listado con los 8 mejores remedios que se pueden utilizar para decirle adiós a este problema.
1. Ajo
Tanto su consumo como su aplicación directa sobre la piel son válidos como tratamiento contra este tipo de trastornos cutáneos.
Al ingerirlo se promueve la eliminación de patógenos dañinos presentes en el intestino y, de paso, se desintoxica la sangre.
También es útil como mascarilla o en forma de pasta, ya que su jugo se absorbe con facilidad en la piel acelerando su recuperación.
Lo más importante es utilizarlo en su estado crudo, porque es la única forma de aprovechar al 100% todas sus propiedades.
2. Aloe vera
El gel que contiene la planta de aloe vera es uno de los remedios más antiguos en lo que tiene que ver con la piel.
Sus propiedades hidratantes y reparadoras estimulan la actividad celular, a la vez que reducen el riesgo de envejecimiento y tratan problemas tan comunes como los hongos y las irritaciones.
Se puede aplicar por sí solo o combinado con otros ingredientes antibióticos como la miel o la cebolla.
3. Sal marina
Una pequeña exfoliación con sal marina ayuda a remover las células muertas mientras combate el hongo cutáneo.
Basta con diluirla en un poco de agua para, después, frotarla en la zona afectada con un ligero masaje circular.
4. Aceite de orégano
Las propiedades antibióticas y antifúngicas del aceite de orégano hacen que sea un buen aliado para aliviar este tipo de afecciones.
Su aplicación directa en la zona afectada reduce la presencia de hongos y acelera la recuperación de la piel sin producir consecuencias adversas.
5. Yogur natural
Las bacterias beneficiosas que contiene el yogur natural resultan útiles para combatir varios tipos de patógenos que afectan distintas partes de la piel.
Aunque a menudo se usa para reducir la presencia de hongos en la zona íntima, también resulta útil cuando se desarrollan en los pies, las axilas o la cara.
Basta con frotarlo con un ligero masaje y dejarlo actuar unos 30 minutos antes de enjugar. Su uso debe ser diario hasta encontrar el alivio deseado.
6. Vinagre de manzana
La razón principal por la que el vinagre de manzana combate los hongos es porque altera el ambiente que necesitan para proliferarse.
Su ácido acético controla la acción de estos microorganismos y regula el pH natural sin alterar los aceites naturales.
Eso sí, no debe ser aplicado de forma directa, porque puede resultar agresivo. La mejor forma es diluyéndolo en partes iguales con agua mineral.
7. Zumo de limón
Uno de los remedios clásicos para el tratamiento de los hongos y las infecciones es el limón. Su ácido cítrico es un poderoso agente antibiótico que acelera la recuperación de la piel sin ocasionarle efectos perjudiciales.
Eso sí, su aplicación siempre se debe hacer en horario nocturno ya que, de exponerse al sol, da lugar a manchas indeseadas.
8. Aceite de coco
El aceite de coco está compuesto por ácidos grasos de cadena media que tienen un efecto poderoso sobre la cándida.
Su contenido en ácido caprílico se ha utilizado desde hace mucho como agente activo para eliminar las infecciones causadas por este patógeno.
Es importante elegir el que viene sin refinar o extra virgen, pues los refinados no tienen las mismas cualidades nutricionales.
Sus efectos se pueden aprovechar mediante su aplicación directa en la zona afectada o tomando una cucharada todos los días.
Por tratarse de remedios naturales es muy probable que se requieran varias aplicaciones para poder notar los resultados.